Esta tarta se caracteriza por su ligereza y suavidad, combinando la cremosidad del queso con una textura aireada que se deshace en la boca.
Ingredientes
- 250 g de queso crema, a temperatura ambiente
- 50 g de mantequilla sin sal, derretida
- 100 ml de leche entera
- 6 huevos grandes, separando claras y yemas
- 140 g de azúcar granulada
- 60 g de harina de trigo
- 20 g de maicena
- 1 cucharadita de jugo de limón
- 1/4 cucharadita de sal
- Azúcar glas para espolvorear (opcional)
Preparación
- Precalentar el horno: A 160°C. Prepara un molde desmontable de 20 cm, forrando la base y los lados con papel de horno. Envuelve el exterior del molde con papel de aluminio para evitar filtraciones durante el baño maría.
- Mezclar queso crema, mantequilla y leche: En un bol grande, bate el queso crema hasta que esté suave. Añade la mantequilla derretida y la leche, mezclando hasta obtener una consistencia homogénea.
- Incorporar las yemas: Añade las yemas de huevo una a una, mezclando bien después de cada adición.
- Tamizar ingredientes secos: Tamiza la harina y la maicena sobre la mezcla anterior, incorporándolas suavemente hasta que no queden grumos.
- Montar las claras: En otro bol, bate las claras de huevo con la sal hasta que formen espuma. Añade el jugo de limón y continúa batiendo, incorporando el azúcar gradualmente, hasta obtener picos firmes pero no secos.
- Unir ambas mezclas: Incorpora un tercio de las claras montadas a la mezcla de queso, mezclando suavemente para aligerarla. Luego, añade el resto de las claras en dos partes, mezclando con movimientos envolventes para mantener la aireación.
- Verter en el molde: Vierte la masa en el molde preparado, alisando la superficie con una espátula.
- Hornear al baño maría: Coloca el molde dentro de una bandeja más grande y vierte agua caliente en la bandeja hasta alcanzar la mitad de la altura del molde. Hornea durante 60-70 minutos, o hasta que la superficie esté dorada y al insertar un palillo, este salga limpio.
- Enfriar: Apaga el horno y deja la tarta dentro con la puerta entreabierta durante 15 minutos. Luego, retírala del baño maría y deja enfriar completamente a temperatura ambiente antes de desmoldar.
- Servir: Espolvorea con azúcar glas antes de servir, si lo deseas.
Información Nutricional Aproximada de la tarta de queso japonesa (por porción, considerando 8 porciones)
- Calorías: 250 kcal
- Proteínas: 6 g
- Carbohidratos: 20 g
- Grasas: 16 g
- Azúcares: 15 g
- Sodio: 180 mg
Preguntas Frecuentes
1. ¿Puedo usar queso crema light?
Sí, pero la textura y el sabor pueden variar ligeramente. Se recomienda usar queso crema completo para obtener la mejor consistencia.
2. ¿Es necesario el baño maría?
Sí, el baño maría ayuda a que la tarta se cocine de manera uniforme y previene que se agriete en la superficie.
3. ¿Puedo añadir sabores adicionales?
Claro, puedes incorporar ralladura de limón o extracto de vainilla para darle un toque diferente.
¿Es Apta para Celíacos la Tarta de Queso Japonesa?
En su versión original, la Tarta de Queso Japonesa no es apta para celíacos, ya que contiene harina de trigo en su preparación. Sin embargo, es fácil adaptarla para que sea segura para personas con enfermedad celíaca o sensibilidad al gluten.
Cómo Adaptar la Receta para Celíacos
- Sustituye la harina de trigo:
- Utiliza harina sin gluten, como harina de arroz, harina de almendras o una mezcla sin gluten diseñada para repostería.
- También puedes usar maicena como sustituto total de la harina, para un acabado más ligero y suave.
- Verifica los ingredientes restantes:
- Asegúrate de que el polvo de hornear, la mantequilla y el queso crema no contengan trazas de gluten. Aunque son naturalmente libres de gluten, algunos productos pueden tener contaminación cruzada.
- Cuidado con la contaminación cruzada:
- Usa utensilios y recipientes limpios, asegurándote de que no hayan estado en contacto con ingredientes con gluten.
Con estas simples sustituciones, puedes disfrutar de una deliciosa Tarta de Queso Japonesa sin gluten sin comprometer su textura o sabor.
Recomendaciones para Acompañar la Tarta de Queso Japonesa
La Tarta de Queso Japonesa es un postre ligero y delicado que combina perfectamente con bebidas y acompañamientos que realcen su sabor suave. Aquí tienes algunas ideas para disfrutarla al máximo:
1. Limonada Casera
- La frescura y el toque cítrico de una limonada casera equilibran perfectamente la cremosidad de la tarta. Puedes preparar una versión clásica con limón o agregar frutas como fresas o mango para un toque diferente. Revisa nuestra receta rápida de limonada casera.
2. Té Verde o Matcha
- Como un guiño a su origen japonés, acompaña la tarta con un té verde o un matcha latte. El sabor terroso y umami del té contrasta maravillosamente con la dulzura de la tarta.
3. Frutas Frescas
- Sirve la tarta con una guarnición de frutas frescas como fresas, arándanos o mango. Estas frutas aportan acidez y color, complementando la textura esponjosa de la tarta.
4. Salsa de Caramelo o Chocolate
- Si prefieres un toque más indulgente, un chorrito de caramelo salado o salsa de chocolate caliente puede transformar esta tarta en un postre aún más irresistible.
5. Café Suave
- Para quienes disfrutan de una bebida caliente, un café suave o incluso un cappuccino acompañan muy bien este postre, añadiendo un toque amargo que resalta los matices dulces de la tarta.
Con estas opciones, puedes disfrutar de la Tarta de Queso Japonesa en toda su gloria, convirtiendo un simple postre en una experiencia completa y deliciosa. 😊🍋🍵🍰